Comprar y reformar

¿Merece la pena comprar y reformar una casa vieja?

Comprar un piso en ruinas para reformar tiene muchas ventajas pero también tiene riesgos e inconvenientes que tienes que tener en cuenta para poder llevar el proyecto a buen puerto. Aquí te damos las claves para que merezca la pena comprar y rehacer.

¡Es rentable! ¡Te ayudamos a encontrarlo!

¿Sale rentable comprar para reformar?

Comprar una vivienda para reformar es una inversión rentable siempre que se haga con inteligencia. Es importante evaluar y analizar el precio del piso, presupuesto de la reforma a realizar, así como el valor potencial de la vivienda tras la renovación. Sin duda, una buena ubicación y una reforma bien ejecutada incrementará significativamente el valor de la propiedad.

También es importante analizar el mercado de la zona. En algunas ubicaciones, por una situación particular, puede salir más rentable comprar una vivienda nueva. Por eso es importante estudiar también el mercado de obra nueva para saber qué opción es mejor en esa ubicación.

En Madrid, el precio medio de un piso de segunda mano es de 250 mil euros frente a los 306 mil de uno de obra nueva. El margen es de 56 mil euros. Con los datos medios del conjunto de España, la cantidad aumenta hasta los 63 mil euros.

En el gráfico podemos ver en amarillo los precios de la vivienda nueva y el de la usada. En amarillo claro vemos la diferencia entre ambos precios.

Esta diferencia de precios nos permite tener margen para realizar una actualización de la vivienda. En función de su estado, el precio de la reforma será menor o mayor. Un lavado de cara para ponerlo en alquiler de forma rápida puede suponer un desembolso de 100 €/m2. Si se trata de una reforma integral, el precio mínimo arranca en 500 €/m2 para una calidad media y a partir de 1000 €/m2 para una reforma de lujo.

Aquí te vamos a explicar todas las ventajas que tiene comprar un piso viejo pero también de todos los problemas que puedes encontrar. Para que evites situaciones desagradables. Queremos que aciertes y disfrutes feliz de tu nuevo hogar.

¿Cuándo SI comprar una casa vieja para reformar?

Si no encuentras en el mercado lo que necesitas: Puedes crear algo a tu gusto y medida en función de tu presupuesto.
Si buscas vivienda en un área específica: Hay que estimar la importancia de la localización de nuestra vivienda con respecto a los lugares que frecuentamos: trabajo, colegios, relaciones,…
Si te gusta personalizar tu espacio y hacerlo a tu medida: Es un proceso creativo e incluso divertido si confías el proyecto en profesionales que lo lleven a buen fin.
Si buscas inversiones rentables: El precio de la vivienda aumentará con la reforma. Además puedes encontrar pisos baratos en áreas no muy valoradas pero con el tiempo mejoren sustancialmente su valoración.
Si buscas propiedades singulares: El mercado de segunda mano es más amplio y ofrece casas arquitectónicamente singulares.

¿Cuándo NO comprar una casa vieja para reformar?

Si hay ofertas interesantes de obra nueva en el mercado: Es bueno comprobar la oferta de obra nueva. A veces puedes encontrar sorpresas en los precios por circunstancias particulares y te puede resultar beneficioso comprar obra nueva.
Si la vivienda tiene altos gastos de comunidad o derramas: Hay que conocer los gastos mensuales que vamos a tener y valorarlo. Un edificio en mal estado puede presentar constantes derramas que hagan no rentable la inversión con respecto a una obra nueva..
Si no tienes claro lo que quieres y te cuesta ver las posibilidades de la vivienda: Hay que pensar bien las necesidades de lo que queremos y estar acompañados por profesionales. Si no se tiene experiencia es fácil cometer errores en la distribución de los espacios.
Si quieres contratar a la empresa de reformas más barata: Los disgustos en las reformas vienen frecuentemente por empresas que dan precios bajos y que luego no pueden cumplir con un trabajo profesional. Evita situaciones de riesgo y cuenta con profesionales para el diseño del proyecto, ejecución y dirección de la obra.

Antes los particulares huían como de la peste de los pisos viejos. La modernización del sector de reformas y la dificultad de acceder a vivienda de obra nueva ha hecho que muchas personas se decanten por comprar para reformar. También ha ayudado la cantidad de programas de reformas donde unos atractivos expertos en reformas te transforman la viviendas de manera emocionante.

¿Cuáles son las ventajas de comprar y reformar?

Situación: Accede a una localización más demandada, céntrica y en un barrio ya consolidado.
Precio: El precio es negociable muchas veces en función de la reforma que vaya a necesitar el piso.
Distribución a gusto: Diseñamos la distribución y espacios acorde nuestras necesidades y objetivos.
Calidad: Controlamos la ejecución y calidad de materiales durante la obra. Algo que no siempre podemos hacer en obra nueva.
Valor aportado: Al dar nueva forma al piso estamos creando algo nuevo con valor único. Otras personas no hubieran podido imaginarlo.
Sostenibilidad: Rehabilitar es sostenible y mejora la eficiencia energética de las viviendas españolas.
Rentabilidad: Un piso nuevo pierde valor desde que se compra. La rentabilidad de los pisos de segundamano es mejor de inicio.
Singularidad: Puedes conseguir un hogar de características espaciales y arquitectura única que darán personalidad a tu vivienda.
Impuestos: El Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP) en la compra de viviendas de segunda mano es menor que el 10% del IVA en viviendas de nueva construcción.
Revalorización: La vivienda reformada aumenta su valor económico y posibilidades de venta con respecto al estado original del piso sin reformar.

¿Cuáles son los inconvenientes de comprar y reformar?

Visualización de potencial: Hay que saber analizar la vivienda y saber si responderá a nuestras necesidades después de la reforma.
Posibles vicios ocultos: También posibles en vivienda nueva pero más destacables en un piso viejo. Algunos vendedores con mala fe pueden ocultar algunos problemas de humedades o incluso estructurales que luego pueden tener un coste alto de reparación.
Tiempo para la reforma: Hay que contar que no será posible entrar hasta completar la reforma. Ese tiempo habitualmente suele ser de 3 meses para la reforma integral, pudiéndose alargar en reformas singulares o por problemas de suministros.
Presupuesto de reforma: Si no está bien planificada la obra o surgen sorpresas durante la reforma habrá que incrementar el presupuesto para completar la reforma.
Financiación: Los bancos no siempre ofrecen financiación para la compra de la vivienda junto con la reforma. Hay que consultarlo antes con el banco o disponer del dinero para la reforma. Otra opción es recurrir a créditos personales aunque con mayores intereses.

En definitiva, comprar una vivienda vieja para reformar puede ser rentable y una buena opción siempre que actuemos con inteligencia y no corramos riesgos. Para ello lo recomendable es acompañarse de profesionales que nos ayuden a ver la mejor opción si no tenemos los conocimientos o experiencia suficiente.